Feliz Navidad y esas cosas - THE_CHEI$
Me encontré recientemente esta entrada, que me hizo pensar un poco sobre el sentido de estas fechas, de cierre de año, fiestas familiares, posadas, días inhábiles, cierre de ciclos, mucho frío, y más.
También Fefo compartió en el Antipodcast su idea sobre la "Antinavidad".
Es común pensar "Es sólo una fiesta más", "No hay nada que celebrar". "No son felices fiestas para mí", "Me siento solo". Vivir esta época con cinismo, desenfreno, y otras emociones extrañas.
Hoy quiero platicar de por qué sinto importante aprender a ser feliz y a descansar.
No podemos negar que en estas épocas suceden cosas malas, indeseables. Mi abuela está enferma, varios conocidos perdieron seres queridos recientemente, algunos otros están en hospitales o en tratamientos. Vamos por la calle y vemos mucha hambre.
De acuerdo en que el sentido vacío de gastar, consumir, presumir, aparentar, nos invade profundamente. Centros comerciales llenos, compras de último minuto. Ver personas que no toleramos, desear vacíamente cosas que no podemos saber si sucederán.
De que lo importante es comprar, regalar, y que entre más dinero gastes, más cariño recibes. Después de que han querido comprar mi cariño con regalos, es normal querer alejarse de ello.
Viendo especiales navideños en TV, observamos extremos. O todo termina con un final feliz mágico, o vemos una dramatización ridícula. Todo ello es muy lejano a la realidad que vivimos cada día.
Me gusta mucho la distinción entre las dos palabras. Se dice que la alegría es momentánea, impulsiva. Una fiesta, una comida, un mensaje sorpresivo.
La felicidad es lenta, más duradera. Implica vivir 24/7 contigo mismo. Tolerarte, entenderte. Vivir en esperanza (aun con todo en contra)
Aprender a ser feliz no ha sido fácil para mí, lo sigo aprendiendo. En particular este año a sido más difícil que otros. Y también a vivir con alegría, desde solo el regalo de estar vivo, de poder hacer lo que disfruto, de estar con las personas, de disfrutar la estética de la vida.
Empezamos a entender que la felicidad viene desde adentro, por la unión de pequeñas cosas, y asimilando sobre lo que podemos controlar. Al poner nuestras expectativas del pasado, presente y futuro en el ahora.
Como workaholico en rehabilitación, me surgen preguntas como ¿Para qué trabajé tanto? ¿Cuánto voy a trabajar este nuevo año? Constantemente presionando el acelerador y freno, buscando la cantidad "suficiente de trabajo". Ni mucha que sea desgastante, ni poca que sientas que no has hecho lo que deberías.
Esto implica pasar por el duelo de: Negación, Ira, Negociación, Depresión, hasta llegar a la Aceptación.
Aceptar que necesitamos descansar. Que está bien bajar el ritmo. Que ya no eres el mismo de antes. Que priorizar tu salud es importante. Que llegar a la máxima velocidad implica frenar en las curvas.
Y quizás lo más doloroso. Que lo que te funcionó en el pasado, no será lo que te funcionará hoy. Entre más envejecemos, más difícil es adaptarse, y al mismo tiempo es cuando más cambio llega a nuestras vidas.
Por ello, aprender a descansar es clave. Y no solamente unos cuantos días al año (en mi país son unos 12 por cada 365)., sino aprender a crear descanso cada día, cada semana, cada temporada, cada año.
Aprender a vivir suena a cliché, aunque lo veo real, lo vivo. Es aprender a enfrentarse a los nuevos retos que cada día trae a la mesa.
Aprender a celebrar, a vivir con alegría, a ser feliz con lo que tienes, y con la esperanza de tener, hacer y ser. Y por último a descansar, o mejor dicho, a tener un merecido descanso, después de un año de retos, emociones, problemas de salud, problemas superados. Luchar contra la entropía, la apatía, los vicios humanos.
Por ello, a ti que lees esto, te deseo mucha fuerza para el día que viene, para el ciclo que cierras, para el momento presente. Mucha salud, mucha alegría, y que disfrutes estos días de invierno. Espero que pronto nos sigamos leyendo.
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EOT
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